Habilidades de funcionamiento ejecutivo
¿Qué es el funcionamiento ejecutivo?
El Centro para el Desarrollo del Niño de la Universidad de Harvard describe el funcionamiento ejecutivo como “procesos mentales que nos permiten planificar, enfocar la atención, recordar instrucciones y hacer malabarismos con múltiples tareas con éxito”. Utilizan la analogía de que, al igual que un sistema de control de tráfico aéreo en un aeropuerto concurrido gestiona de forma segura las llegadas y salidas de muchos aviones en múltiples pistas, el cerebro necesita este conjunto de habilidades para filtrar las distracciones, priorizar tareas, establecer y alcanzar objetivos y controlar los impulsos.
Los niños nacen con la capacidad de desarrollar habilidades de funcionamiento ejecutivo. Necesitamos proporcionar a los niños entornos de aprendizaje positivos para ayudarlos a practicar las habilidades del funcionamiento ejecutivo antes de que tengan que usar estas habilidades de forma independiente.
La función ejecutiva y las habilidades de autorregulación dependen de: la memoria de trabajo, la flexibilidad mental y el autocontrol.
- La memoria de trabajo gobierna nuestra capacidad para retener y manipular distintas piezas de información durante cortos períodos de tiempo.
- El autocontrol nos permite establecer prioridades y resistir acciones o respuestas impulsivas.
- La flexibilidad mental nos ayuda a mantener o cambiar la atención en respuesta a diferentes demandas o a aplicar diferentes reglas en diferentes entornos.
El enfoque de nuestro programa de funcionamiento ejecutivo es enseñar varias habilidades que fomentan la planificación y la organización. Una persona con autismo aprende las habilidades del funcionamiento ejecutivo de manera diferente, teniendo en cuenta los problemas sensoriales, motores y sociales. Nuestro programa de funcionamiento ejecutivo se enfoca en habilidades que siguen hitos de desarrollo apropiados en un orden secuencial, lo que permite a nuestros estudiantes más jóvenes desarrollar las habilidades fundamentales necesarias para continuar aprendiendo y creciendo a medida que hacen la transición a situaciones más complejas.
Para los niños pequeños, podemos centrarnos en las habilidades fundamentales del funcionamiento ejecutivo, tales como:
- Seguir rutinas
- Mantener la concentración
- Memoria de trabajo
- Flexibilidad
- Controlar los impulsos
En el caso de los niños mayores, podemos centrarnos en:
- Planificación de un cronograma
- Recordar información
- Organizar el tiempo
- Materiales de organización
- Seguimiento de las tareas
- Inicio de tareas
- Flexibilidad
- Regulación de las emociones
Las habilidades del funcionamiento ejecutivo para adolescentes y adultos jóvenes pueden incluir:
- Completar el trabajo dentro de los plazos
- Hacer un plan para completar las tareas
- Seguimiento de las tareas
- Usar un calendario para organizar eventos
- Completar listas de verificación